La salubridad del hogar es una de las preocupaciones constante de las amas de casa, por eso en Toallas Personalizadas le daremos a conocer métodos para eliminar ácaros y bacterias de tus toallas. Estos suelen producir alergias, resfriados, gripe y hasta focos de infección. Por ello es importante mantener todo limpio. Conozca cómo en el artículo a continuación.

Desinfectando tus toallas

¿Cómo hacer para que tus toallas siempre huelan bien? Estas piezas, debido al uso que se les da, están compuestas por tejidos que permanecen húmedos por mucho tiempo. El agua junto a la humedad en una tela tan gruesa, se convierte en un foco de bacterias como los ácaros y moho. Por ello, debes asegurarte del secado de tus toallas, en la medida de lo posible. Los ácaros y bacterias son microorganismos que tienen la capacidad de multiplicarse rápidamente. También de ocultarse en superficies que “en apariencia” están totalmente limpias. Aunque no lo creas, están presentes en sábanas, móviles, mando de control y hasta en tus toallas. Además, la presencia de estos microorganismos promueve enfermedades e infecciones respiratorias y gástricas. Las toallas podrían ser el hábitat de bacterias como:

• Escherichia coli. Causante de náuseas, diarreas y dispepsia.
• Listeria. Ocasiona gastroenteritis, fiebres, vómitos).
• ácaros, provocan conjuntivitis, rinitis o asma.
• Hongos. Provocan dermatitis, rinitis, otitis.
• El staphylococcus aureus, ocasiona diarrea, agotamiento físico, cólico abdominal).

Para liberarte de ellos, basta con que realices un limpieza profunda y adecuada no solo a tus toallas, sino a los espacios de tu casa en general. Una de las recomendaciones, es el uso de toalleros. Después de usarlas, lo mejor es colgar las toallas para que estas estén lo más estiradas posible, sin pliegues ni arrugas. La idea es que circule el aire y asegurarte que se sequen lo más rápido posible. Bajo ningún concepto, se pueden tener las toallas amontonadas. Guardadas en lugares oscuros o con poca ventilación, si están mojadas porque esto puede favorecer el crecimiento de bacterias y provocar un mal olor permanente.

¿Cómo lavar las toallas?

Una de las normas generales y recomendación clave es lavarlas por separado de otras prendas. Porque sueltan pelusas e hilos, además, absorben los colores que sueltan las otras. Igualmente con este método evitas exponer el resto de las piezas a los posibles gérmenes. Cuando se le añaden potenciadores al detergente, se corre el riesgo de dañar o desgastar otras prendas que estén en la colada. Esta norma es casi obligatoria si se debe lavar una toalla que esté manchada. Para lavar las toallas de manera correcta, se recomienda utilizar la mitad de detergente que se suele usar en cargas de ropa normales. También se aconseja que se use uno que sea suave. Los detergentes normales hacen que las toallas pierdan sus propiedades absorbentes y las hace menos esponjosas. Las toallas sí se deben lavar con agua caliente para poder eliminar, además de la suciedad, gérmenes y bacterias. En el caso que estas sean de tejidos delicados, contengan bordados, colores delicados o elementos decorativos, será preferible usar agua fría para que se conserven durante más tiempo. Los suavizantes tampoco son tan recomendados. Esto debido a que disminuyen las propiedades de absorción que puedan tener las toallas. Lo que sí se puede hacer, es emplearlos cada dos o tres lavadas para que le aporten suavidad y esponjosidad. Debido a que, con su uso, las toallas terminan llenas de piel muerta y suciedad, es necesario desinfectarlas cada cierto tiempo. Existen diversas maneras de lavar tus toallas muy bien para evitar los diversos microorganismos como ácaros, e. coli, listeria, etc. Puedes lavar las toallas con amoniaco.

3 métodos para eliminar ácaros y bacterias de tus toallas

Nada más desagradable que una toalla con malos olores, como ya lo hemos mencionado, estas suelen guardar residuos, gérmenes y bacterias. Por ello se deben seguir una serie de recomendaciones para evitar esto y que esté realmente desinfectada.

1. Ten una buena higiene personal:

Quizá te parezca algo extraño, pero tu cuerpo tiene bacterias que al juntarse con la humedad, generan, no solo molestos olores sino enfermedades en la piel. Cuando te duches, utiliza suficiente y abundante jabón en todo tu cuerpo. El agua no puede barrer con todas las bacterias que están en tu piel, por eso se recomienda usar abundante jabón para que las bacterias no queden atrapadas en tu toalla. Pies, axilas e ingle, son los lugares donde se generan más bacterias, así que lávalos muy bien.

2. Cuelga tu toalla después de usarla:

Todo depende del lugar en el que vivas, pero trata de colgar la toalla al aire libre y que le pegue sol. Una buena opción es dejarla cerca de un lugar de la calefacción. Cuando las toallas se extienden al sol, además de matar los gérmenes, evita los malos olores. Lo que sí debes evitar es dejarlas húmedas en el baño, dormitorio, piso o cesto para de la ropa sucia. Porque la humedad acelera la multiplicación de bacterias.

3. Desinfecta tu lavarropas:

Cada 15 días se le debe hacer una limpieza a tu lavarropas. Por más que los detergentes y suavizantes, tengan buen olor, muchas veces, no logran quitar los malos olores de la ropa y es justamente por el lugar donde se lavan. La limpieza del lavarropas consiste en -antes que laves las toallas- laves la ropa blanca. Sobre todo que uses cloro y vinagre, que son un gran desinfectante y seguramente eliminará todas las bacterias. Tu lavarropas quedará bien sanitizado.

¿Cómo quitar el mal olor de las toallas?

Otro de los problemas que pueden acarrear las toallas o albornoces, es que se llenen de malos olores. De no tratarse a tiempo, se harán difíciles de eliminar. Entre las recomendaciones para evitar desagradables olores, debe seguir los siguientes consejos:

No coloque demasiadas toallas en el lavarropas:

Aunque necesites un poco más de tiempo, siempre será recomendable lavar las toallas de a poca cantidad. Así los químicos que tienen el detergente en polvo puedan penetrar las telas y eliminar las bacterias. El agua caliente repotencia las sustancias químicas de desinfectantes y del jabón.

Seca muy bien las toallas:

Ten la certeza que después que las hayas lavado, cuando las recojas del tendedero o las saques de la secadora, estén bien secas. Si las guardas húmedas, tendrán un mal olor terrible, por mucho detergente o suavizante que le hayas colocado en la lavada.

Lava las toallas con frecuencia:

Las toallas de mano, rostro y cuerpo, deben ser cambiadas, por lo menos, dos veces por semana. En temporadas de altas temperaturas o calor, -donde el cuerpo transpira más- la frecuencia debería ser más alta. Las toallas del gimnasio deben ser lavadas a diario porque en estos centros suelen haber más bacterias que en cualquier otro lugar.

Utiliza vinagre:

Este líquido tiene la capacidad de eliminar todo tipo de gérmenes y bacterias, gracias a su naturaleza ácida, así que será tu gran aliado para eliminar los malos olores en las toallas. Para que sea realmente efectivo, debes lavar las toallas dos veces, el primer ciclo con vinagre y el segundo con detergente. Si usas agua caliente, será mejor aún.

Bicarbonato de sodio:

Este es otro gran aliado en la limpieza y eliminación de bacterias en el hogar. Para que sea realmente efectivo, agrega media taza de este en tu ciclo normal de las toallas y lávalas con agua caliente, con esto eliminarás malos olores y bacterias.

Cuidados en la habitación

No solo las toallas se deben lavar una vez por semana, la ropa de cama también es propensa a ser un lugar ideal para los ácaros y favorecer reacciones alérgicas. Por ello también debe ser bien lavadas con agua caliente y vinagre para eliminar todos esos microorganismos. En cuanto a tus camisetas, siempre será recomendable usar camisetas ecológicas debido a que no suelen terminar con malos olores porque sus materiales son orgánicos. ¿Qué te han parecido estos métodos para eliminar ácaros y bacterias de tus toallas? Recuerda compartirlos en tus redes sociales.